Lamentablemente por ahora no existe un tratamiento curativo para este tipo de enfermedades, sin embargo, si existen medidas relacionadas a hábitos de vida saludables y otros aspectos farmacológicos y ambientales, así como apoyo a los cuidadores, que pueden ayudar a enlentecer la progresión de la enfermedad, y a mejorar la calidad de vida del paciente y su familia.